Los enjuagues bucales o colutorios son soluciones que se emplean después del cepillado con el fin de eliminar gérmenes y bacterias. Existen varios tiempos de enjuagues bucales destinados a distintas funciones.
El enjuague bucal no puede remplazar al cepillo de dientes, pero si puede ayudarnos con nuestra higiene dental, llegando algunas zonas difíciles de alcanzar con el cepillo. Aunque el enjugue bucal tiene sus beneficios, también podemos encontrar algunos mitos que no tienen que ver con la realidad algunos de ellos son:
- El enjuague bucal ayuda a combatir la halitosis, este mito no es del todo falso, ya que ayuda a reducir el mal aliento durante un corto periodo de tiempo, pero no se trata de una solución permanente, para esto es mejor acudir a un profesional.
- Es importante no abusar del enjuague bucal ya que en grandes cantidades puede ser negativo para nuestros dientes. Se recomienda usar de forma preventiva y sin exagerar.
- También es importante saber que se recomienda no diluir en agua ya que esto puede disminuir su eficacia.
Muchas personas piensan que lo que escuece cura, sin embargo, si el enjuague bucal tiene grandes cantidades de alcohol puede causar irritaciones en la boca, algo que es perjudicial para nuestras encías. Además, los enjuagues bucales sin alcohol no son del todo inofensivos, también puede provocar efectos secundarios, debido a la presencia de ingredientes clorhxidina, ante estos casos, la mejor opción es consultar con un profesional cual es el mejor tipo de enjuague bucal según tus necesidades.
Ante cualquier duda no dudes en ponerte en contacto con un especialista.